Esta por comenzar la Segunda Guerra Mundial y la inteligencia sobre la situación social y económica de otros países se ha convertido en un activo valioso. Como resultado, Japón, ha establecido una nueva organización de espionaje conocida como la "Agencia D" para obtener esta arma.
Bajo el mando del teniente coronel Yuuki, ocho agentes han sido asignados para infiltrarse y observar algunos de los países más poderosos, informando sobre cualquier avance relacionado con la guerra. Para llevar a cabo estas peligrosas tareas, estos hombres han entrenado sus cuerpos para sobrevivir en condiciones extremas y han estudiado numerosos campos, como las comunicaciones y los idiomas. Sin embargo, su mayor fortaleza radica en su capacidad para manipular a las personas a fin de obtener la información necesaria para darle a su nación la ventaja.